lunes, 26 de mayo de 2014

cuidados del bebe


principales cuidados de un niño

La piel del bebé es muy tersa, delgada, permeable y frágil. Es normal que presente enrojecimiento con cierta erupción cutánea, grietas o escamas en algunas zonas debido a la rozadura del pañal, la ropa u otros agentes externos.

Los cuidados generales que debes tener con la piel de tu pequeño son los siguientes:

EL BAÑO báñalo diariamente con agua templada  entre 10 y 15 minutos. Utiliza un jabón específico para recién nacidos, con la menor cantidad de perfumes y colorantes. Te aconsejamos que lo limpies con la mano, sin utilizar esponjas. Al finalizar el baño, aplícale una crema hidratante, también específica para bebés.

EL PERFUME. Intenta no aplicarle colonia directamente en la piel, ya que puede provocarle reacciones alérgicas. Es mejor rociar la ropa con unas gotas de perfume , pero éste debe tener un nulo contenido en alcohol.

EL CAMBIO DE PAÑAL. al limpiar la zona del pañal utiliza agua y jabón. También puedes emplear productos específicos para recién nacidos, pero evita el talco y los aceites minerales.
El perfume del bebé

El sentido del olfato y el olor son más relevantes de lo que solemos pensar. El recién nacido empieza a crear su memoria olfativa asociando los olores a determinadas emociones. Los aromas que crean vínculos emotivos, ya sean buenos o malos, son los que perduran en la memoria. En cambio, aquellos olores que no tienen alma desaparecen del recuerdo.

En nuestra sociedad nos perfumamos desde pequeños con olores que fundamentalmente provienen de frutas cítricas, de flores, de maderas y de algunas hierbas aromáticas. De la combinación entre estos elementos se obtiene un sinfín de fragancias que asociamos a unos valores y nos suscitan algunos recuerdos. Con el perfume infantil, el bebé descubre y memoriza nuevos olores que pasan a serle familiares.
Cómo elegir el perfume del bebé

Hay varias maneras de perfumar al bebé. Con la aplicación de aceites y cremas infantiles impregnas su piel de una ligera fragancia. Pero para conseguir que el olor perdure deberás utilizar colonia infantil. Antes de adquirirla, debes tener en cuenta que cumpla con las características adecuadas.

1. Las fragancias infantiles deben ser naturales, hipo alergénicas y sin alcohol. De esta manera respetan y cuidan la piel del bebe, muy delicada y sensible.

2. Es aconsejable que no apliques la colonia directamente sobre su piel, sino que pongas un poco en tu palma de la mano y a continuación la apliques al pequeño. También puedes poner unas gotas de la fragancia en su cepillo y peinarle a continuación.

Cortar las uñas y el cabello al bebé
La primera vez que cortas las uñas o el pelo al bebé, parece un poco complicado. Sin embargo, basta con unas sencillas operaciones. Te explicamos cómo hacerlo.

Cortar las uñitas y el pelito del bebé también forma parte de los hábitos de higiene. Es normal que la primera vez que te dispongas a cortarle el pelito o las uñas a tu pequeño tengas miedo a lastimarlo. No te preocupes, es muy fácil. Te lo explicamos, paso a paso.

Siento al niño con la espalda bien erguida y rodéale el busto con los brazos para que no se mueva.
Coge las tijeras con tu mano derecha y, con la izquierda, coge primero su manita izquierda y después su derecha. Para protegerle de las tijeras, pon el pulgar encima de su uña. El mejor momento para cortar las uñas es después del baño, porque es cuando están más blanditas.


Después los pies.
Sujétale, de manera que permanezca quieto y sentado. Corta las uñas siguiendo una línea horizontal.
Preparar el biberón


LLENAR DE AGUA
Una vez el biberón ya está esterilizado, cojamos su base con la mano. En el caso de que aún esté muy caliente, utilicemos una pinza apropiada. Para empezar, debemos echar al biberón la cantidad de agua necesaria, ya sea hervida o embotellada


Después, añadámosle el número exacto de medidas de leche en polvo que se indica en el paquete, en función del agua.


Nivelemos con un rasero o un cuchillo el borde de la cucharita para eliminar la leche en polvo sobrante. Siempre debemos respetar la proporción aconsejada entre polvo y agua.


MEZCLAR BIEN
Disolvamos la leche en polvo en el agua y agitemos el biberón, evitando sacudirlo, lo que provocaría la producción de espuma.


LA TEMPERATURA
Antes de dar el biberón al pequeño, debemos comprobar la temperatura de la leche, echándonos unas gotas en el dorso de la mano

Por último, ya podemos dar a nuestro hijo el biberón. La leche debe gotear a un ritmo regular y moderado.
Veamos los pasos que se deben seguir para que vestir al bebé se transforme en un momento muy agradable, tanto para el pequeño como para sus padres.



Sobre todo durante los primeros días, cuando el pequeño nos resulta tan frágil y delicado, vestirle puede parecer un poco complicado  Sin embargo, si se actúa con amor y mucha delicadeza, el bebé no se asustará ni siquiera cuando la ropa le pase por encima de la cabeza 

Para facilitarte esta tarea, hoy, nuestro artículo de Escuela de padres está dedicado al momento de vestir al bebe

Te explicamos, paso a paso y con imágenes cómo debes actuar. Sólo debes recordar una cosa: hablarle de lo que haces con mucha dulzura.


1. PREPARACIÓN
Se debe preparar todo lo necesario para cambiar al pequeño. Han de tenerse al alcance de la mano toallitas limpiadoras, crema para prevenir las irritaciones de la piel, pañales, unas braguitas o un bodi y un pelele. Después, se debe poner al pequeño encima del cambiador y desnudarle.


2. DESNUDARLE Y LIMPIARLE
Si se ha hecho pipí, debemos limpiarle, con una toallita, los genitales, las ingles, los pliegues de los muslos y el culito. Si si se ha hecho caca, debemos cogerle por los tobillos con la mano izquierda y elevarle ligeramente para poder limpiarle el culito con la toallita.

3. PONERLE EL PAÑAL
Extender el pañal por debajo del bebé y doblarlo por entre las piernas. Abrochar el pañal con las tiritas adhesivas.

4. PONERLE EL BODY
En primer lugar, debemos sentar al niño sobre una pierna, sujetándole con el brazo izquierdo. A continuación, enrollaremos el bodi con las manos, ensanchando el escote. Después, lo pasaremos por su cabeza de una manera rápida, pero delicada.

5. PONERLE LAS MANGAS
Para atenuar la incomodidad del niño, se debe sostener su brazo con la mano izquierda e introducir la derecha en el interior de la manga, partiendo de su extremo, hasta que se consiga coger su manita. A continuación, hay que entrar su brazo en la manga y desenrollarla.


6. PONERLE EL PELELE
Todo resulta mucho más fácil si el pelele se abrocha por la espalda. Hay que comenzar a vestir al niño partiendo de los pies. Se debe enrollar una de las perneras, introducir el pie y desenrollarla. Después, repetir la misma operación con la otra pierna. A continuación, elevar los pies del bebé, sosteniéndole por los tobillos, y pasar el pelele por debajo de su culito.



7. AHORA, LOS BRAZOS
Con el pelele, se debe emplear el mismo método utilizado para poner el bodi






8. POR ÚLTIMO, ABROCHARLE EL PELELE
Hay que tumbar al niño sobre un lado y, a continuación, ponerle boca abajo con los brazos abiertos. Ha llegado el momento de abrochar los cierres. Algunas veces, los cierres están colocados delante, lo cual hace que no sea necesario dar la vuelta al pequeño.

Alimentación

1. Los recien nacidos  tienen el estómago muy pequeñito, por lo tanto la cantidad de leche que les cabe es también pequeña. Los intervalos entre las tomas deben ser los que su cuerpo exija. Todos los pediatras recomiendan la lactancia a demanda (salvo excepciones por enfermedad).

2. Muchos bebes  regurgitan después de mamar o de tomarse el biberón . Es algo normal. No hay razón para preocuparse, pues no suele ser mucha cantidad. Por regla general, solo echan la leche que han tomado de más.

3. En ocasiones, el peque no se queda satisfecho después de mamar  un largo rato. Esto puede pasar porque no mama bien: si succiona solo el pezón no sacará mucho. Hay que procurar que la areola del pecho también esté dentro de su boca.

4. Si se tienen gemelos, es muy normal que al principio lloren más que otros bebés cuando se encuentran hambrientos, ya que tienen que esperar su turno. Podemos colocar a cada uno en un pecho, ambos a la vez, y en la siguiente toma, intercambiarlos. Si toman biberón, los ponemos en frente, sobre un cojín y se lo damos al mismo tiempo.

5. Lo ideal es que cada gemelo tenga su propio ritmo de comida , es decir, cuando lo piden. Si su hermano sigue durmiendo, le dejaremos hasta que se despierte. Poco a poco irán acercando horarios.

6. Hay bebés que se duermen mamando. Probablemente no tengan mucha hambre o aún estaban medio dormidos. En este caso, basta con mover un poquito el pezón para que despierten y sigan chupando.

7. Si no les damos pecho, los recién nacidos tienen que aprender a tomar el biberón. Lo mejor es que al principio sea siempre la misma persona la que se lo dé, pues cada uno tenemos una forma diferente de darlo. Algunos bebés se desconciertan fácilmente.

8. No es aconsejable darle nada que no sea leche, ni infusiones ni ningún preparado que nos hayan dicho que le ayuda a echar los gases.

9. Para evitar que ingiera aire, si le damos el biberón, hay que verificar que está lo suficientemente inclinado como para que la leche ocupe toda la tetina y no haya burbujas de aire que pueda tragar sin querer.

10. Durante cinco o diez minutos después de mamar, los bebés muestran un interés especial por su entorno. Si lloran después de comer, probablemente sea porque quieren juerga y nosotros no les estamos haciendo caso. También puede ser porque tengan gases.

11. El eructo no es obligatorio, pero la mayoría de los bebés se sienten mejor después de haber echado el aire. Para ayudarles, podemos incorporarlos apoyándolos sobre nuestro hombro, o bien ponerlos boca abajo encima de nuestras rodillas y les damos palmaditas en la espalda. A veces los gases pueden provocar fuertes dolores. Si es así, debemos consultar al pediatra.

12. La postura adecuada para acostar al bebe después de comer es boca arriba. Es más segura y hará que le molesten los gases en menor medida. Esta postura es la que debe tener siempre en la cuna para evitar la muerte subita o si duerme con sus padres asegurate de que siempre este bien y en un lugar donde no se pueda caer o tu lo puedas lastimar debes tener mucho cuidado.

13. Las manchas de leche en la ropa huelen mal. Se pueden quitar conuna mezcla de agua y levadura (una cucharadita para una taza de agua). No solo se quita el mal olor, también la mancha.

14. Directrices para el aumento de peso: en los cinco primeros meses, la mayoría de los niños duplican su peso y hacia el final del primer año, suelen pesar tres veces más de lo que pesaron al nacer.

15. pesar al bebe a diario no tiene sentido y puede convertirse en una fuente de estrés innecesario. Si está contento, activo y crece bien, significa que está bien alimentado. El pediatra lleva un seguimiento exhaustivo, si él detecta algo raro, tomará algún tipo de medida.

16. Los niños que se crían al pecho hacen más deposiciones que los que toman leche artificial. En general suelen hacer entre una y cuatro cacas al día.

17. A partir de los tres meses aproximadamente, los niños necesitan una cierta rutina en su vida. Por lo tanto, hay que procurar acostarles a la misma hora y siguiendo un mismo ritual. Esto deberá mantenerse durante los siguientes años.

18. Cuanto más pequeños son, más se sobresaltan si nos acercamos precipitadamente, sin previo aviso. Primero hay que mantener contacto visual y hablarles. Luego, colocando una mano debajo de la cabeza y otra bajo el tronco, les levantamos con suavidad. No son tan frágiles como parecen, así que cojámosles con suavidad pero con firmeza.

19. Uno de los puntos más delicados de los bebés son las nalgas. Por lo tanto, conviene cambiar su pañal a  menudo y así evitar que se irriten. Aunque los modernos superpañales los mantienen secos durante largas horas, el calorcillo húmedo en la zona de la barriga no es nada bueno para la piel.

20. Cambiarles los pañales sobre una mesa o un cambiador es más cómodo para que la espalda del adulto no sufra, pero hay que tener un cuidado extremo para evitar accidentes. Los bebés son capaces de girar su cuerpo y rodar a las pocas semanas.

21. Antes de poner un nuevo pañal, hay que limpiarle con suavidad y secarle muy bien, procurando que no quede nada de humedad entre los pliegues.

22. Durante las primeras semanas se le puede bañar en el lavabo. Conviene colocar un protector para no golpearle accidentalmente contra el grifo. También puede usarse una bañerita.

23. Para asearle, en principio bastaría con el agua tibia. Si usamos jabón, que sea neutro. Los polvos de talco están desaconsejados: podría inhalarlos.

24. Si el bebé tuviera miedo a la bañera, podemos sentarle desnudo sin nada de agua, darle algún juguete y luego ir llenando la bañera poco a poco.

25. Al bañarle, hay que cerrar primero el grifo del agua caliente y después el de la fría. Así, evitamos que si el grifo gotea, le caigan gotas de agua muy caliente.

26. La herida del cordón umbilical  no necesita un vendaje especial mientras cicatriza. Se puede bañar al pequeño si luego secamos bien la zona del ombligo. Esa parte la lavaremos con una toalla mojada en agua tibia, luego la secamos y colocamos encima una gasa limpia. Si la herida supura o sangra, hay que consultar al pediatra.

27. La mayoría de los recién nacidos llevan demasiada ropa. Si están abrigados en exceso, pueden llegar a sufrir un sofocón: sudan y se sienten mal.

28. En los primeros meses es normal que el pequeño tenga las manos y los pies fríos. Pero si la piel a la altura de los omóplatos o la tripa está caliente y seca, significa que no tiene frío.

29. Durante los primeros meses la cabecita del niño necesita apoyo. Cuando le tengamos en brazos, hay que sostenerla en todo momento con suavidad pero con firmeza. Los recién nacidos se asustan mucho cuando se les cae hacia un lado o hacia atrás.

30. Las uñas de los bebes crecen muy rápido. El mejor momento para cortárselas es cuando duermen profundamente. Debemos usar unas tijeras especiales para bebés, con punta roma (redonda).

No hay comentarios.:

Publicar un comentario